Ayer me paso una cosa que bueno... podíamos llamarla... la vez que casi mato dos veces al mismo tipo...paso a relatar... Deambulelando por el medio del monte andaba yo.. cuando me encontré a un tipo parado delante de unas puertas, primera en la frente... tan acostumbrado estoy a sacudir primero casi le caso cuando oig: "Me puedes ayudar"... yo iba corriendo hacia él mandoble en alto... cuando de repente tengo que girar brusco y parar en seco para evitar dejarle caer una "amistoso" golpe de espadón de 5 kilos.
Empezamos a hablar y me cuenta que aquella es una tumba de su familia y que un nigromante reconroso estaba en el interior para convertirlos a todos en zombies, y que una tía suya había entrado a detenerlo....
Tanta pena me dió que decidí hecharle una mano, entramos en la tumba, y yo a lo mío, cascar craneos y matar a todo lo que se menea... y de repente veo un cofre, y ni corto ni perezoso lo abro, y me "afano" su contenido.... y en esto oigo "Eso pertenece a mi familia..." ¡¡¡¡Oscuridad!!! Me olvidé del gachó... ahora me va a atacar y me "gode" vivo... así que antes de que él me dé le casco yo... no vaya a ser.. y cuando me apresto a calzarle un espadazo.. oigo que dice... "bueno puedes quedártelo a fin de cuentas me estas ayudando..." por segunda vez tuve que retener un golpe que casi le alcanza... Moraleja... si esta historia tiene moraleja yo diría que es... "No ayudes a nadie.. por si acaso tienes que matarlo..."
Otra cosa que me llamó mucho la atención... ayer me encontraba yo en medio de las montañas, realizando lo que podíamo llamar "cresteando" o sea no cojo un camino ni a tiros y voy siempre por el medio del monte.. cuando me encuentro con precioso cañón (geográfico, se entiende.. que nadie piense en uno de las guerras Napoleónicas) con unas vistas muy chulas, y un río que corría por modo de las montañas. En un momento dado me encontré un tronco de proporciones consderables colocado a medio de puente entre dos montañas. El tronco estaba lleno de ramas, y dificilmente dejaba ver lo que había al otro lado. ¡Pero coño! Yo tenía que ir al otro lado y a mi aquel puente natural me veía de fruta madre.. me pongo a cruzarlo y cuando estoy en el medio .. el susto padré.. oigo "No creas que puedes escapar" y apostado allí había un bandido con un arco... allí a mas de treinta metros sobre el suelo, escondido en el medio de las ramas de un tronco descomunal a modo de puente entre dos montañas, con el camino más cercano a varios kilómetros... y yo me preguntó ¿Qué coño hace este pavo aquí? ¿A quién coj**** va a dar el "palo" a parte de a mí? Obviamente me lo cargué, y seguí mi camino, pero el "susto" no me lo quitó nadie... era lo último que yo esperabe encontrarme en ese tronco... La moraleja de esta es "Cuidado, siempre puedes encontrarte a alguién en los lugares mas insospechados..."
Editado por Bjorklum, 30 November 2011 - 03:01 PM.